But to live outside the law, you must be honest - Bob Dylan
Hace unos meses leí que, conforme a la moda zombie que ahora atravesamos, el Lazarillo de Tormes iba a ser tuneado conforme a la nueva tendencia, y se había escrito una versión posmoderna, "Lazarillo Z", en el que el protagonista de un infundio anónimo anterior (detrás del cual se ve la mano zombie, y aún su poderoso lobby xD), el protagonista cuenta su verdadera historia, como exterminador de muertos vivientes en una peligrosa plaga que asoló España en el siglo XVI. Suena divertido, pero no sé como será su lectura.
Lo que sí me parece es que sus protagonistas están en el candelabro de la actualidad como nunca: España parece un país de pícaros, desde la clase más humilde hasta las habitaciones de palacio, y quien no es un pícaro es un zombie que transita la actualidad atemorizado y ansioso, aún sujeto a las perspectivas denigrantes que cada día le son impuestas. ¿Durante cuánto tiempo? Cada día, miles de personas engrosan y fortalece un ejercito de la desesperanza y sostienen, sostenemos, una mirada cansada y cada vez más fiera, pensando en una posible salvación, en una vuelta a la humanidad desde eso féretros laborales o desde la intemperie de las tormentas del mercado, ese eufemismo que hemos aprendido a temer. Me gustaría pensar que todavía creemos en el sistema, en que las cosas pueden funcionar con algunas reformas...pero quizá sólo nos obstinemos en un sueño que nos han inculcado, de casas de verano y vacaciones , derechos de los trabajadores y sociedades abiertas que ahora se desmoronan, y que eran invernaderos en la Antártida.
"El conflicto es el padre de todas las cosas", concedido, señor Heráclito. Pero hay conflictos creadores y fértiles y hay conflictos que simplemente son las vísperas de la destrucción sin sentido, y en los que nadie puede ganar (y nadie son siempre unos pocos, poquísimos). Oir a los apóstoles de las ideas gastadas, que han contribuído más que nadie a esta situación con su dogmatismo y su falta de agallas para atreverse a escuchar a los otros, que la solución es radicalizar las propias...creencias (llamarlas ideas sería excesivo) por las que mueren (y por el que estarían dispuestos a matar, en otras épocas), que han decidido perfectas y sin fisuras, es ver una pelea de zombies encorbatados que comen su propio cerebro para evitar que puedan modificar su forma de pensar. Y en ese espectáculo estamos, sin creatividad, sin impulso, sin esperanza. Sin vida.
Y luego están los vivos, no los que tienen vida, sino los que andan vivos. Para contratar, malgastar, acusar, ascender, desviar fondos, meter mano en la caja, vender la moto en marcha mientras eres capaz de ver perfectamente que montan en un patinete al que le falta una rueda, y sin alterar el gesto. Uno entiende que la vida es dura y que a veces no queda más remedio que vivir en la tangente, mirar hacia otro lado, sobrevivir, sin más. Lo que no se puede entender es la obsesión por presumir de ello, por situarse en el centro de la escena después de haberse revolcado en el fango y pretender que admiremos su limpieza. Y la tolerancia del mundo zombie, y los que todavía no lo son, ni pícaros tampoco, al engaño, la estafa, el uso deleznable de lo público para los intereses más abyectos (con su conseguiente desprestigio, altamente denunciado por austríacos que viven del mismo erario público, por cierto). Parecemos vivir en un muno en el que la trampa es un síntoma de inteligencia superior, lo que si bien se piensa significa que todos debemos dar por supuesto que vamos a intentar ser engañados, siempre. Y cada vez se acerca más ese día, y esa es la realidad cotidiana... ¿cómo coño puede sobrevivir una sociedad así?
Tenemos una jefatura de Estado salpicada en unos escándalos tales que debieran haber provocado la imitación, voluntaria o forzosa, de su antepasado Alfonso XIII, unos representantes electos que cree que su función es proteger a sus compañeros de partidos antes que a los ciudadanos que representan, organismos públicos de tal falta de competencia que parecen sacados de los tebeos de Mortadelo y Filemón, empresarios que consideran un abuso que nadie pueda interferir en su libertad de laminar a sus empleados, sindicatos que siguen la hoja de ruta de los Parlamentos y no la de las necesidades de sus afiliados, Gobiernos que nos mienten o nos tratan como a niños (niños imbéciles, en concreto). ¿Y en tales manos hemos encomendado nuestros espíritus y la cosa pública? Zombies sin cerebro, malditos autómatas conformistas. Hasta que dejems de serlo, y puede que sea a lo bestia. O quizá no, y sigamos persiguiendo un sueño, que a veces, quizá se cumpla.
Mientras los pícaros acuden a las fuentes y afirman convencidos que consideren los que heredaron nobles estados cuán poco se les debe, pues Fortuna fue con ellos parcial, y cuántos más hicieron los que, siéndoles contraria, con fuerza y maña remando salieron a buen puerto. Bueno, es un punto de vista razonable para un pícaro, aunque tiene un considerable defecto: suele ser falso. Lo que llevo peguntándome toda esta entrada es porque persisto en llamarlos así, "pícaros" si el diccionario de la RAE escribe claramente "la gente más despreciable de la plebe" como definición del término gentuza.
Nota final: En la elaboración de esta entrada no se ha maltratado a ningún zombie, salvo al propio creador de la misma. Para compensar, una imagen bonita...
Sabías tu que todas estas nuevas versiones Z de clásicos son solo parte de un creciente temor (y fascinación) acerca de un posible apocalipsis-zombie?
ResponderEliminarCreo que ya comenzó, en mas de una manera.
See ya!
xDDDD Me encanta la nota final, que no me entere yo que se daña un solo zombie, xDDDD.
ResponderEliminarLa verdad es que todo lo que es ha dicho es la pura realidad, esperemos que las cosas cambien.
Un beso y feliz navidad. :).
Como diría Jesulín, dos palabras resumen el texto: Im-presionante.
ResponderEliminarMuy bueno, Explorador. Cojonudo.
¿No crees que en nuestro país en politica los zombies abundan? Muertos vivientes, se llevan lo que pueden a la saca y no hacen una a derechas...bss FELIZ navidad
ResponderEliminarLos zombies son una perversión del ser humano... como el sistema mismo...
ResponderEliminarMuy buen análisis, Explorador, me ha encantado tu post y muy de actualidad.
¿Te has inspirado en Walking Dead?? ; ))
Un abrazo
Si no somos honestos con nosotros mismos, ¿cómo íbamos a serlo con los demás?
ResponderEliminarTengo comprobado que la vida acaba poniendo a cada uno en el lugar que le corresponde. Últimamente, estoy viendo caídas brutales y, pese a las barbaridades cometidas, da pena, porque detrás hay siempre dramas, familias. Vivimos, ciertamente, tiempos aciagos.
Si no somos honestos con nosotros mismos, ¿cómo íbamos a serlo con los demás?
ResponderEliminarTengo comprobado que la vida acaba poniendo a cada uno en el lugar que le corresponde. Últimamente, estoy viendo caídas brutales y, pese a las barbaridades cometidas, da pena, porque detrás hay siempre dramas, familias. Vivimos, ciertamente, tiempos aciagos.
Tenemos lo que merecemos. La imagen, fantástica.
ResponderEliminarUn abrazo
mmmmm noto cierto aire pesimista en tu buenísimo post. Pensemos que alguna solución tendrá todo este caos. Hay países que han prescindido de los pícaros y ahora tienen técnicos en su gobierno, aunque me temo que los han buscado de entre los vivos. No van a poner zombies...
ResponderEliminarUn abrazo!
Muy acertado, como dice un amigo mío, "En España los que no roban son los que no pueden". Aunque algo se está moviendo. Matas e Iñaqui son peces gordos, y otros que salen a flote.
ResponderEliminarAh, los conflictos. Fértiles, bienvendios seáis.
En mi caso una autocrítica: debiera participar de algún modo, debiera hacer algo para controlar la res pública. Con los años me estoy volviendo pasivo.
Un abrazo. QUe los dioses del aire helado no azoten la eterna Irlanda y al Explorador que anida en ella.
¿Cuándo vuelves, Explorador?
ResponderEliminarAcertada ironía, gracia en la palabra y análisis concluyente... desolador panorama; y lo más dramático: real. Que los verdes prados y la morena o rubia cerveza te ayuden a soportar el pesado fardo,
ResponderEliminarUn abrazo.
DEMIAN
Explorador! Un abrazo desde aquí para ti y para Irlanda, claro. No digo na de cómo está nuestra jefatura de Estado. De hecho, cuentan que el discurso de Nochebuena va a ser una "bomba, incendiario", según fuentes de la propia Casa REal. La leche, cómo está el patio. El Lazarillo tenía más clase e ingenio que esta gente. Te lo digo yo.
ResponderEliminarbs
Grace a tutti :)
ResponderEliminarTom, algo había oído. Me sorprende, porque los zombiesson asquerosísimos, pero no dan nada de miedo, creo yo. Dicho esto, quizá muera a manos de uno xD
María, Feliz Navidad, y me alegra volver a saber de ti, espero que vaya todo bien. No, no maltrato zombies jejej, y sí, esperemos que las cosas vayan mejorando...
Jodidos, muchas gracias, me alegra que te guste :)
Winnie, sí que lo creo, supongo que son buenos trabajos, porque nadie se quiere ir de allí, ni aunque sea un muerto viviente jajaja
Gracias, Silencia, sí, una perversión, bien pensado y bien dicho :) No, no he visto esa serie, aunque he oído hablar de ella ¿Merece la pena? Un abrazo
Pues sí, Zambullida, quizá debiéramos empezar por nosotros. Yo no estoy tan seguro de que el tiempo premie y castigue, pero aún así, hay quetratar de hacer lo correcto. Tiempos aciagos, desde luego.
RedactorSEO, me alegra que te guste la imagen. ¿enemos lo que nos merecemos? En parte sí...espero que no del todo, porque estaríamos aún peor si fuera así ;)
Ethan, sí, creo que hay soluciones y que no tiene sentido regoderse en lo mal que están las cosas. Simplemente, a veces viene bien un desahogo ;)
Igor, es hora de que queramos participar, sí, estoy de acuerdo. Y también creo que de esto puede salir algo mejor, aunque duela. Un abrazo. Los dioses están locos, cambia de clima cada 5 minutos, pero se puede aguantar ;)
Zambullida, llegué aquí hace dos días, puede adelantar un poco mi vuelta, así que disfrutando estos días antes de volver a volver :)
Demian, sí, y la buena gente de aquí y de allí, también. Vamos soportándolo como podemos, pero de momento no asfixia :)
Luisa, ¡un abrazo! el tuyo me lo quedo, que Irlanda ya tiene muchos pa sí ;P Sí, lo del tipo este ha debido ser flipante, es cas lo único que he seguido de España estas semanas y me ponía de una mala leche...y además eso. Sin ingenio ni clase, como mafiosos cazurros, por si fuera poco. n fin. Besos :)
Gracias a todos por pasaros, estaís invitados a una ronda, vosotros elegís cerveza ;) ¡hasta pronto!
Amigo: cómo no entenderte! si soy Argentina, hace diez años exactamente, que se vivía lo mismo que en Europa, miles de nosotros se fueron al exterior a buscar algo de la esperanza que digo, no mi paías, pero los politicos de turno les negaban.
ResponderEliminarHoy en día se ha vuelto la tortilla, te lo cuento asombradísisma. Y si nostros pudimos salir , con más razón vosotros!
Feliz Navidad y que soplen vientos de cambio para todos!
Tienes toda la razón: engañar parece un mérito en lugar de algo vergonzoso. Y yo tampoco creo en el sistema, auque forme parte de él.
ResponderEliminarGran reflexión... verdades como puños.
Un abrazo
Gracias a los dos: Perla, supongo que es bastante comparable, sí, pero también en lo bueno, en nuestra capacidad de voltear la situación. Gracias, amiga, habra que escuchar a los Scorpiosn, entonces ;)
ResponderEliminarDrywater, yo tampoco, yo también. Gracias por pasarte :)
¡Un abrazo a ambos!