lunes, 8 de noviembre de 2010

Sitios donde viviría, gente que hubiera querido conocer (y uno)

Hay otros mundos que están en éste, y a veces no es mala idea alojarse por temporadas en algunos. Hoy os hablo de una habitación particularmente agradable, con vistas al mar. Se llama Monkey Island (el I), y si quereís sentir esas sensación de recordar vagamente quienes eraís y las pequeñas cosas que hacen la vida mejor, os lo recomiendo (sobre todo, sí ya lo conociaís, pero si no, también, da igual) ¡Veníos, será divertido!

Seremos Guybrush Threepwood, un aspirante a pirata con unas aptitudes mejorables y un nombre inmejorable para no poder ser admitidos en cualquier hermandad pirata que se precie. Alternamos filosofía ("¿Alguna vez te has preguntado si sólo somos figuras de novela"? le preguntaremos al vigía cegato) sabiduría popular (¿qué lleva el grog?) política (estricto Marley), amor (esa Gobernadora Marley) delitos menores, biología, chulería, alta cocina. Y combates de espada, ingenio e insultos contra la sword master. Y un circo en horas bajas tan divertido como cualquier circo que se imagine uno, y hechizos vudú, iglesias y prisiones, un tesoro escondido. Y un viaje por el ancho mar de la aventura, naúfragos y playas que más acá de la pantalla no existen, caníbales y un malvado fantasma. Y amistad, desdicha, ligereza y diversión a raudales. El mar que es un espejo, la gente que nos hace ser como somos, las acciones que podemos llevar a cabo con todos los objetos que la vida de Guybrush pone en su camino, la reiteración de que también ser feliz es una cuestión de valentía, y la inmensa alegría de saber que, cuando la vida es airada y nos mira con ojos rojos, nos dificulta y daña, podemos sonreír de lado y pronunciar lentamente las palabras mágicas: "Que apropiado. Tú peleas como una vaca".


Y también hay gente que me hubiera gustado conocer. Leyendo pausadamente un libro, encontré la historia de uno de ellos. Se cree que hijo de romanos capturados por los godos en una incursión en la capadocia y prisioneros, nació con el nombre de "el pequeño lobo" y aprendió lo que podía aprender alguien en su situación. Llegó a ser Obispo, los creyentes lo veneraban, los emperadores lo recibían y cuando los cristianos fueron perseguidos, fue el pastor de su pueblo, otro Moisés que los condujo hasta Nicópolis, en los Balcanes, donde el emperador Constancio les concedió. Sin embargo su faceta como teólogo (era arriano, y al fin y al cabo, su fe perdió) y pastor de pueblos es lo de menos. Tradujo la Biblia del griego al godo, y para ello, inventó el alfabeto gótico (o ulfilano), y de paso, escribió (o copió) la primera obra literaria germánica. Borges lo cita,

España de los duros visigodos,
de estirpe escandinava,
que deletrearon y olvidaron la escritura de Ulfilas

y cuando encontré su historia me preguntaba si el idioma que hablo pudiera tener una mínima influencia de aquel gramático solitario, el pequeño lobo hijo de esclavos, que para propagar su credo tuvo que iniciar una literatura.

17 comentarios:

  1. Vaya, me has dejado un poco desconcertado, casi sin saber que decirte. Pero luego he pensado que seguramente ellos se cambiarían por ti, que tienes todo el conocimiento del mundo al alcance de tu mano. Lo que hagas con él ya es cosa tuya para que otros algún día puedan escribir sobre ti.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  2. Qué interesante entrada. Me encanta eso de que ser feliz es una cuestión de valentía.
    Del mundo que describes... ¿puedo ir?

    ResponderEliminar
  3. Juanjo, sí, viviría en el Monkey, pero no renunciaría a la mía :DD sí, si no viviera donde lo hago, no hubiera soñado con esos gráficos antiguos y ese mar donde refulge esa luna, antes de empezar la gran aventura.

    Luisa, puede que sea verdad. Y a ese mundo puedes ir cuando quieras, por mí eres bienvenida siempre. Ahí está esperando a que lo descubras ;)

    Gracias a ambos. ¡Un abrazo!

    ResponderEliminar
  4. ¡Guybrush Threepwood! No querrías tener ese nombre. No conozco Monkey Island pero me suena a Piratas del Caribe.

    ResponderEliminar
  5. Oye, si me inivtas acepterá gustosamente la invitación lo dices pinta bien, es sugerente

    ResponderEliminar
  6. ¡Atónito! Que hubo un tipo que creó un alfabeto gótico y yo no lo sabía... Ah. Ya lo dijo Gandalf: "corred, ¡insensatos!", se refería a tipos como yo.
    Y ese mundo del que hablas. También me pido entrada libre... Y estaba pensando que se podría convertir en un antro para tomar largas copas.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  7. Bienvenidos todos a Monkey Island, si tuviera una pequeña parcela...

    Antxon, ¿creerás que he visto la segunda pero no la primera de Piratas del Caribe?. Tengo amigos que me dicen que las semejanzas son muchísimas.

    Madison, lo es. Es un mundo de humor y alegría :)

    Igor, yo lo conocí hace 4 días. Y el bar de Melee Island es un despiporre, habrá que brindar con buen grog.

    ¡Gracias a todos!

    ResponderEliminar
  8. Explorador, quiero eso que dices. Alternar filosafía, política y amor, mucho amor. También con el ingenio, un circo y jugar a buscar el tesoroi escondido. Después encontrarlo y quedarme con la amistad que propone un final lleno de alegrías y de destrezas. Tal vez me quede con un simple libro en mis manos. Allí seguro que encontraré lo prometido e imaginadoy seré feliz enarbolando mi valentía. Mi espada será mi alma. Gracias por porponernos este mundo. Un saludo desde lo más alto.

    ResponderEliminar
  9. Me apunto a lo de las largas copas con Igor. Genial idea

    ResponderEliminar
  10. Yo soy más de Hyrule (complejo de Zelda, supongo), pero me apunto al brindis.

    ¡Un beso!

    ResponderEliminar
  11. Bebiendo grog a estas horas de la noche y disfrutando del párrafo final, te mando un saludo desde tierras sureñas.

    ResponderEliminar
  12. http://www.scummbar.com/tx/games/mise/screenshots/Bar5%20copy.jpg

    http://www.rogerdavies.com/wp-content/uploads/2009/08/secret-of-monkey-island-scumm-bar.jpg

    Vamos al bar :) a bebernos largas copas de grog,

    http://i216.photobucket.com/albums/cc3/demm9000/2clicks/groggroggrog.jpg

    que lleva:

    Acetona, Ácido para baterías, Ácido sulfúrico, Endulzantes artificiales, Glicol propílico, Grasa para ejes, Pepperoni, Queroseno, Ron, SCUMM, Tinte rojo nº 2

    U otra cosa más convencional, a gusto del consumidor :D

    Jota, re-bienvenido, me alegra volver a saber de ti, menuda proeza de los Jazz, ¿eh? :)

    tanci, de nada, es un mundo fantástico y donde siempre hay diversión, encantado de que vengas, también.

    Luisa, ya sabes, grog..o lo que gustes.

    Patricia, ese es otro mundo que apetece visitar de tarde en tarde, supongo. Pero el brindis se puede hacer por todos ellos :)

    Marta, ya sabía yo que eras dura, y que el grog, que incluso deshace las copas, no sería impedimento para ti. Te acompañaría, pero empiezo con una fanta. Muchas gracias por pasarte ;)

    ¡Un abrazo a todos, de nuevo, acodaros en la barra o sentaos donde no haya piratas malencarados o pendencieros(o sí, como gusteís)!. A pasar buenos ratos. Gracias, es divertidísimo rememorarlo en tan buena compañía.

    ResponderEliminar
  13. Dejaré por un momento mi fiel piedra y saldré y flotaré hasta Monkey Island, fuertes vientos soplarán y las palabras renacerán, saludos. Te sigo...

    ResponderEliminar
  14. Hazme un hueco por favor!!!! Yo tb quiero vivir en Monkey Island!!!

    ResponderEliminar
  15. Hola, Explorador.

    ¿Aún queda sitio para uno más en Monkey Island? Y ¿quién no ha querido alguna vez en su vida ser un pirata? Pero como los que imaginó Stevenson, no los de cartón piedra. Por cierto, me encanta el grog.

    Saludos y gracias por tu visita

    ResponderEliminar
  16. escupiendolibertad, bienvenidísimo a esta página y a Monkey Island, ¡a vivir grandes aventuras! :) nos leeremos

    Kira, pos supuesto, hay hueco de sobra, y cuanta más tripulación haya, más divertido es.

    Fran, desde luego, piratas de verdad, malvados pero con un gran atractivo por su modo de vida.

    Gracias a todos :)

    ResponderEliminar