viernes, 28 de mayo de 2010

La banda que pudo reinar (1.1 Interludio de la tarde soleada y del derecho a la pereza)

Y estoy aquí tumbado a la bartola
no estoy para nadie
ni siquiera para ti
y aquí estoy tumbado a la bartola
me rasco la barriga y escucho a los Kinks
estoy tocando el trombón en una tarde de sol
no me apetece trabajar


Siniestro Total


Esta entrada ha sido fastidiada. Después de tenerla prácticamente hecha, se borró, así que me temo que su perspicacia, lucidez y amenidad serán imposibles de reproducir en esta ;P . Se siente.

La canción, ¡¡hay que oirla!! :DD

http://www.youtube.com/watch?v=1h1oRP7FfBw

Fue número 1 (en una época en la que los números 1 significaban algo) en las listas británicas, y es un delicioso ritmo medio de music hall (ese aprecio por las tradiciones musicales siempre) en la que el protagonista se queja de estar cansado de estar cansado de las obligaciones y los deberes que ensombrecen el placentero disfrute de una tarde soleada. La canción mece al oyente y su sortilegio perdura despues de que el coro termine de cantar el estribillo, manteniéndole en un estado de quietud muy grato. O al menos, eso me pasa a mí. Es una canción que haría mi casa, un prodigio de letra profunda y sencilla, un bajo tenaz que simula un martillo repicante que es vencido por la festiva actitud de quien decide bajarse del mundo durante una tarde irrepetible que nunca más volverá.

Por su parte, Paul Lafargue, yerno de Karl Marx y pariente lejano de Ray Davies y de todos los que reverenciamos el lado lúdico de la vida (y somos algo vagos, me temo), escribió un texto marxista y antimarxista a la vez, arrebatado, audaz y lúcido (también tópico y excesivamente idealizado, supongo), titulado El derecho a la pereza,

http://www.marxists.org/espanol/lafargue/1880s/1883.htm

que comienza así:

"Una extraña locura se ha apoderado de las clases obreras de las naciones donde domina la civilización capitalista. Esta locura trae como resultado las miserias individuales y sociales que, desde hace siglos, torturan a la triste humanidad. Esta locura es el amor al trabajo, la pasión moribunda por el trabajo, llevada hasta el agotamiento de las fuerzas vitales del individuo y de sus hijos. En vez de reaccionar contra esta aberración mental, los curas, los economistas y los moralistas han sacralizado el trabajo. Hombres ciegos y de escaso talento, quisieron ser más sabios que su dios; hombres débiles y despreciables, quisieron rehabilitar lo que su dios había maldecido...".

Podeís leerlo completo en el enlace, y formaros la opinión que queraís. A mí me gusta mucho.

Hoy, en la situación actual de crisis perpetua y eterna, esa en la que sólo parecen importar la falta de rentabilidad(viene de renta), productividad (viene de producto) y la falta de trabajo es la verdadera malidición para millones de personas que sienten que su valor humano es el que otro semejante pague por él, en el que el dinero y el poder se han entrelazado de una forma tan íntima como el espacio y el tiempo después de Einstein y son las fuerzas rectoras de un diminuto cuadrante del Universo, la obsesión por el trabajo o su falta se ha convertido en una distorsión irresistible sobre nuestras formas de vida (absolutamente privilegiadas, vistas en perspectiva. Pero es lo que conozco).

Y se me ocurre que en esta plaga, todos perdemos y somos víctimas. Cuando la educación es instrucción profesional que sólo satisface las necesidades que pueda demandar el multiforme mercado laboral para que el neoproletariado esté preparado a cualquier eventual demanda de fuerza productiva, fuerza rentable, fuerza competitiva...fuerza que sufre, ríe y tiene ganas de ser feliz, su libertad es una mascarada, una ficción con la forma de algún demonio sarcástico. Cuando el saber sólo tiene la obligación de ser útil, nosotros somos sus esclavos, no sus dueños. Otro enlace lo explicará mejor que yo:

Si alguien se hubiera limitado a decirnos que los institutos de bachillerato o las universidades son demasiado caros, que la ilustración como instrumento de emancipación y de justicia social ya no resulta rentable y que hay que acometer su reconversión para transformar los antiguos establecimientos de enseñanza y de investigación en modernas expendedurías de “conocimiento-rápido” o “conocimiento-basura” al estilo de las empresas de trabajo temporal y precario, esto nos habría resultado muy penoso desde el punto de vista profesional y personal, pero también muy conocido si tenemos alguna experiencia y alguna memoria de clase trabajadora. Lo verdaderamente deshonroso es que esta humillación se ha envuelto en los ropajes de una “revolución del conocimiento” sin precedentes que llevará a nuestros países a alcanzar altas cotas de progreso y puestos de cabeza en el hit parade internacional de la innovación científica. En El País del 22 de Abril de 2006 (“Juan Pablo II”), Rafael Sánchez Ferlosio recordaba una vez más que “la apología positiva del ‘trabajo’ en sí mismo y por sí mismo surgió con el capitalismo y su necesidad de mano de obra, y fue enseguida recogida sin rechistar por el marxismo; la exaltación del trabajo –sin determinación de contenido– como virtud moral se desarrolló como la más perversa pedagogía para obreros”. Nosotros tendríamos ahora que decir que “la apología positiva del ‘conocimiento’ en sí mismo y por sí mismo” surgió con la derecha ultraliberal y su necesidad de empleados inestables, y fue enseguida recogida sin rechistar por la izquierda aerodinámica; y que “la exaltación del conocimiento –sin determinación de contenido– como virtud moral” se ha desarrollado al modo de “la más perversa pedagogía” para obreros del saber descualificado.

http://firgoa.usc.es/drupal/node/41470

No sé que conclusión se puede sacar de 3 ideas mal conexas y una canción con aires de fiesta y cesped suave. Se me ocurre una tentativa: La frase del geómetra Teodoro, quien hablaba (en una tarde soleada, imagino) con Sócrates sobre la naturaleza del saber (si sólo debía ser útil, supongo), y que advertido por el tábano de Atenas sobre la complejidad del tema y del tiempo que podría llevarles, replicó airado, ¿Es que acaso no tenemos tiempo libre? .

No conozco la respuesta de Sócrates, y supongo que que cada uno debe buscar la suya, y yo la mía. Lo que sí intuyo es que no hay pregunta más importante que hacerse que esa. En ello andamos, a ratos tumbados en la hierba, a ratos intentando llegar a ser "hombres de provecho". Siento no poder reproducir la genialidad de la anterior entrada, peeerooo... ;PP. Hasta pronto :) ¡y os deseo que permanezcaís ociosos mucho tiempo libre!



sábado, 22 de mayo de 2010

Nunca fue tan hermosa la basura




El gran pensador español José Luis Pardo, tiene este título en su último libro, na recopilación de textos periodísticos y ensayos. Plagio dicho título, aunque el contenido no sea el mismo, le pido perdón por ello, pero es que la frase es demasiado buena. Realmente, nos hemos acostumbrado a ella, y ya no la guardamos en bolsas, la ponemos sobre la mesa del comedor para digerirla mejor. La nuestra, la de todos, la de nadie...hay una parte para todos, haceros sitio, por favor...

Me levanto, legañoso y perdido, recordando lo que fue ayer; otro día pasado entre nubes bajas, viendo, oyendo, leyendo a contertulios, expertos, cargos estrafalarios y ostentosos, gurús y líderes. Discursos repletos de lugares comunes, planos y machacados. Me abruma la locura de los días, así que escucho alguna canción, como la que contiene esa frase. Telediarios: entre los bienpensantes, los cínicos y los que viven en la luna (con todos mis respetos para la luna), recuerdo que he de encontrar pronto otro país del que no me sienta orgulloso, pero que no me avergüence ni humille a diario (breve ilusión; llega el apartado de internacional, y me vuelvo a frustrar). Llega la hora de los deportes, todos deslumbrados ante las hazañas millonarias que nos saquen a todos de nuestro agujero de sinsentido. La cháchara insoportable, la marea sucia que arrastra pecios de honor abatido y que como una corriente esférica se retroalimenta de más suciedad para que siempre parezca nueva. El lujo hortera y prepotentemente zafio, el dinero en su trono, las muchedumbres cargadas de sacos de pena dispuestas a sacudir o apalear al enemigo que sus presentadores odien, la tempestad de los insultos y las calumnias sobre cualquier persona más conocida que las demás y que, en mayor o menor escala, mañana se abatirá sobre vosotros.

Pienso en mi día, buscando entre la niebla un futuro que yo, la situación, la fluctuación de los mercados, las órdenes y reglamentos en oscuros y tristes ministerios y mis decisiones equivocadas ha abaratado. Oigo el rumor de la ciudad, cambiando los latidos del tráfico entre semáforo y semáforo por olas verdosas y azuladas, y miro más allá de los tejados hacia un cielo recorado entre escorzos de antenas venerables y agolpadas en una hiedra color azul oxidado. Camino entre calles que los días agotarán, entre gente preocupada y sorda a los gritos de la existencia. Desengáñate: eres tú. Cuesta ver la vida entre claxones, precipicios mentales y el filo peligroso de lo cotidiano, pero sin duda debajo de todo ello, una vida sueña. Siento que aunque respiro, la verdadera vida está ausente, sin embargo. Y es duro pensar que pueda llegarse a la mar sin haberla entrevisto siquiera.

Y para olvidarse de eso y de los aguijonazos de la realidad festiva como un bufón malicioso, la basura lustrosa y reluciente, una vez y otra más, en nuestro viaje a la nada, y los únicos lenitivos que a veces parecen quedar, el desprecio y el cinismo. No se puede vivir así, pero nunca vienen mal para un desahogo feroz y fugaz que limpie las pequeñas heridas que el aluvión, al arrastrarnos, dejó. Veo el futuro como basura, por culpa mía, de todos, pero también de los políticos basura con su vida alejada de todo lo que pueda pasar en la calle, salvo eventos como partidos de fútbol y eurovisión, en que nunca pierden la ocasión de demostrar que son gente "normal", encendiendo a las masas para que el rencor les impida la lucidez. El ocio para olvidar la vida de los trabajos basura y angustias es la basura que machaca las pieles de otros para que en los descansos de los cafés los grupos rían maliciosamente sobre los otros, o sufran o suban al cielo con las andanzas de una casta de multimillonarios , u olviden sus desgracias mostrando lo más crudamente posible la muerte y la violencia de otros, en el ceremonial abyecto del morbo más cruel. El arte es una industria cárnica que busca fórmulas sensacionalistas para que los productos de consumo que ofrecen se digieran y, sobre todo, se reciclen mejor Por las noches, los campos de diversión arden, sin alambradas ni torres de vigilancia, para que los desahogos festivos ofrezcan la mínima tasa de transgresión tolerable al sistema basura. Y cuando uno se pone a escribir esto y se repasa, se avergüenza, con tanta demagogia basura. Pero es lo que hay, y me cuesta siempre escribir entradas, así que quedará. A pesar de todo, siempre hay alguna flor que puede crecer y que da sentido a todo esto. Así que para acabar por donde empecé, una pregunta de una entrevista digital con el señor Pardo, que ofrecerá más motivos para pensarlo que mis desmañados chillidos:

Hola José Luis, me gustaría preguntarle, ¿Cree usted que en la época actual, cuando la basura posee tanta belleza, lo que consumimos, vemos e incluso admiramos, es más basura que nunca? Un saludo, y gracias.

Creo que hoy tenemos una clase de basura bastante distinta (no sólo por su abrumadora cantidad) de la que tuvieron las sociedades que nos han precedido. Es una basura muy hermosa, en efecto, porque ha sido concebida ya en su origen para ser reciclada, y eso significa que no es sencillamente nada, nada más que una suerte de ungüento amarillo con un ritmo de caducidad muy rápido y que tiene poca aptitud para colmar las carencias endémicas de los seres humanos. No es que sea ni más ni menos basura que antes, es que sencillamente viene disfrazada de lujo, de brillo, de fulgor y revestida con los atributos de la moda y la piel del dinero. Eso es lo que la hace más peligrosa, que no huele mal.

Amén.

Volveré con más alegría la próxima entrada!!!!! :DDDD

lunes, 10 de mayo de 2010

Morir mañana...


A la derecha del río, se encuentra un tilo solitario. Su fronda amable había servido muchas veces para que el sol se filtrase en la cantidad aceptable para dar calidez sin abrasar, y sentir su caricia mezclada con el viento de la ribera. Por eso había acabado por considerarlo, en una broma privada, una especie de templo antiguo que sólo él conocía y sólo él sabía como venerar. De vez en cuando se arrodillaba, se sentaba sobre sus talones y mantenía la espalda erguida mientras cerraba los ojos para sentir el calor en los párpados y esa luz imprecisa que se posa en los ojos velados, mientras alzamos la cabeza al sol. Y a veces había llegado a sentirlo como una verdadera oración, para que la vida inagotable del lugar lo amansara, la sombra lo protegiese y la savia lo renovase. Enseguida se sentía ridículo por el ritual, esperando que nadie lo hubiera visto(no había mucho peligro, era una zona sorprendentemente poco transitada) aunque siempre descansado.

Pero de todo ello hacía ya demasiado tiempo. Cuando volvió, sólo el río, los árboles y el sol parecían haberse mantenido inmutables tras el desastre. Y él había visto casi todo lo soportable, y gran parte de lo insoportable, salvo lo que sucedía en su propio lugar, y por eso volvió como un extraño. No conocía el mundo al que regresó. Todo lo que el tiempo traspasa va formando un surco imperceptible poco a poco, que más adelante se convierte en un foso imposible de salvar. Todos habían sufrido y todos habían visto lo que no puede expresarse, pero ellos, al menos, lo había compartido todo, y se había mantenido unidos. Él...lo que vió y lo que sintió nunca podrían abandonarlo ni su carga sería soportada por nadie más. ¡Que vacíos resaltaban ahora esos años de separación y abandono forzoso sobre el muro de su vida!, eran huecos sin alma donde se asomaban sus peores recuerdos. Y ni siquiera podía decir que su esfuerzo había servido para aminorar el de los que se quedaron. Había partido sin saber por qué, y había vuelto sin saber a dónde. Y no supo que buscar que le ofreciera una nueva mañana.

Allí está, entre las primeras hojas caídas que el viento ha desperdigado, oyendo el rumor del río, sintiendo el sol resbalar por su cara como lágrimas, con el cuello vencido hacia atrás. Sus manos están crispadas, querría poder dormir mil años, y despertar de nuevo para volver a sentirse vivo de nuevo, más allá de la penumbra que le vacía y le consume. Pero también querría sacar el puñal que nunca le abandona desde hace días, sentir el filo en su carne maltratada y rodar hacia el agua, para quedarse allí, cerca de su templo que nadie conocerá. Pero es una lucha breve, la brisa y el rumor del río, lo aplacan y sus manos se abren. No sabe que pasará luego, pero ha decidido que, aunque no sabe adonde irá, no se irá hoy.



Cuando era muy pequeño, tuve un sueño breve: Tumbado en el sofá de mi salón, una serpiente se acercaba lentamente y me picaba, de una forma amistosa. Luego subía su cabeza y sonriendo me decía que sólo viviría los siguientes 60 minutos. Pocas veces fui tan consciente de la placidez de la vida como en ese sueño(creo que fue uno de los casos en que sabes que sueñas), y, aunque algunas veces pensaba en ese sueño y sentía algo más de angustia, siempre me pareció que la reacción que sentía en esa hipotesis es imposible, pero de algún modo, más instintiva y natural, que otras, salvo que el punto de angustia, dolor y remordimientos, siempre va a estar presente: en ocasiones, las lágrimas no son negociables.

Estos días, por unas causas o por otras, he leído y recordado anécdotas y curiosidades sobre las muertes ajenas o sobre la muerte, en abstracto: Otón, que en su guerra civil contra Vitelio por el poder en Roma, dijo que uno podía morir por muchos, pero no muchos por uno, y fue encontrado muerto a la mañana siguiente, antes de la batalla; Wittgenstein, cuyas últimas palabras al personal médico que se encontraba con él fueron "díagles a mis amigos que he tenido una vida maravillosa; Yukio Mishima, que pensó que a su decadente pais le conmocionaría su suicidio ritual; otro escritor que suicidó para llamar la atencion de su libro, y lo consiguió, pero tuvo malas críticas...y he pensado en ello, en la luz y la sombra, en la exaltación y la apatía, y como la muerte se ha convertido en kitsch (porque es imposible convertirla en tabú), y cuando no, en obsesión morbosa. La falta de naturalidad en su trato, en definitiva. En un libro hermosísimo e impactante, Cita con la cumbre, Juanjo San Sebastián, un alpinista, narra su ascensión al K2 en la que perdió a un compañero y amigo, haciendo lo que les gustaba, y en el sitio en el que querian estar. Se cuenta con la lógica de quien asume un riesgo y a veces tiene que pagarlo, con una actitud gozosa, lúcida y valiente antes las circunstancias.

Así que con todo ello, me he puesto a pensar últimamente en el propio concepto que hemos creado, que hace que una visión más serena acabe pareciendo poco vital o morbosamente triste, mientras nuestra vida aparece cada vez (o eso me parece) más apática y deslucida. ¿Podría tener alguna relación?. Pues la verdad es que...no lo sé. La rebelión contra nuestra condición mortal y frágil es comprensible, pero cuando se transforma en una negación absurda, sólo conlleva más sufrimiento y angustia, creo. Pero también es verdad que hablar así es muy fácil, cuando uno no siente y puede permitirse el lujo de pensar en ello como una abstracción lejana. Pero lo cierto es que si la serpiente de mi sueño me dijera que debía irme mañana, creo que sentiría aún más el dolor que iba a causar en los que se quedan que en el mío propio...hasta los últimos momentos, esos en los que el corazón se rebela. Mi abuelo pudo morir en su cama, rodeado de su familia, despidiéndose de todos nosotros...y a pesar de que hay momentos en los que el dolor no puede negociarse, ese recuerdo ha traído mucha paz cuando lo recordamos. Ojalá siempre pudiese ser así. La muerte como el final del consumo de un regalo maravilloso, o de un camino repleto de maravillas que no merecíamos pero nos fueron concedidas (mientras escribo esto, recuerdo algo que dice San Sebastián en su libro, "al menos a los que nacimos en el hemisferio bueno en la época buena", es injusto pero es así, y para nosotros debiera serlo...pero la felicidad siempre parece difícil) y que incluye apredizajes dolorosos y misterios que nunca dejarán de causarnos placer y alegría, rebeliones y dentelladas, paz y susurros, dolores que no comprendemos y recodos del camino que nos ofrecen descubrimientos y conocimientos que mejorarán nuestro viaje, tragedias que nos hieren...y el tiempo a nuestro lado, como una nube que va cambiando mientras pasa, que nos lleva y es llevado por nosotros de un lugar a otro hacia todas esas experiencias que algún día terminarán. Y debe pasar así. Y aunque no debiera....es.

Es muy fácil escribirlo aquí, y supongo que mucho más difícil vivirlo....pero eso también es la vida, el ensayo general para una obra que no será representada, así que mejor buscar una buena actuación :)

Así que, suponiendo lo que es imposible de suponer con certeza, aunque tuviese mucho por hacer y muchas espinas clavadas, creo que no sentiría nada más que agradecimiento por los que compartieron mi viaje, y si perdí la gracia del mar y las olas son amargas, me gustaría pedir perdón por el trago que haría pasar a la gente que me regala el don de su aprecio. Y sentir que la escasez de tiempo convierte cada segundo aburrido, cada instante desperdiciado y cada oportunidad perdida en joyas de mi insignificante vida propia. Y los buenos momentos, que reluzcan como soles, antes de apagarse. Aunque quizá no sea así, pues nadie ha vuelto, así quiero imaginarlo y vivirlo, si los dioses me conceden la oportunidad, dentro de mucho tiempo (tampoco estoy ansioso por demostrar mis teorías xD), espero.

No me iré mañana.

Morir parece fácil,
la vida es lo difícil:
ya no sé sino usarla
en ti, con este inutil
trabajo de quererte,
que tú no necesitas.

Luis Cernuda.

miércoles, 5 de mayo de 2010

La banda que pudo reinar (1, formación, ascenso, cumbres)

Hace ya unas décadas, mientras los Beatles arrasaban en todo el mundo y cambiaban la música popular para siempre, y un grupo llamado Rolling Stones comenzaban a conocerse y a subir peldaños hacia su inmortalidad, había un tercer grupo (aunque con la efervescencia que se vivía entonces en la música britáica, quizás otros tengan en su podio a otros) que iba a su aire y era el mejor de todos ;P , The Kinks. Su historia es trágica en cierto modo, por varias circunstancias no llegaron a ser tan conocidos como pudieran haberlo sido (me refiero a un nivel mundial y eterno, vamos), pero aún así, siguen teniendo varias joyas que merece la pena recordar, siempre. Y como ocurre con todos los grupos que nos gustan mucho, sus canciones más típicas acaban por aburrirnos un poco más y no suelen llegar a ser nuestras favoritas. Así que habrá que iniciar un recorrido atípico (su trayectoria fue larga, además, habrá que recortar y...¡¡ a positivar! inmediatamente xDD), no será una historia demasiado informativa, pero intentará hacer llegar el gusanillo mítico para que queraís oírlos, y creo que os merecerá la pena.

Hablar de The Kinks es hablar de Ray Davies, un compositor majestuoso e inigualable. Sus melodías y sus letras tienen una sencillez aparente y siempre frescura, pero son artefactos milimétricos capaces de hacernos evocar con una intensidad asombrosa. Junto con su hermano Dave (con quien tuvo una relación tempestuosa a lo largo de los años) , el bajista Pete Quaife y el batería Mick Avory forma (en realidad parece ser que los dos formadores fueron Dave Davies y Pete,y con otro batería antes de Avory, en realidad, pero que más da) The Ravens y poco después The Kinks, y de allí a la historia. Comienzan versionando temas ajenos, influídos por esa corriente que vino más allá del mar y alimentó a los grupos británicos incipientes con los temas de rythm&blues y el rock&roll primigenio de Chuck Berry o Little Richard, entre otros, para acabar moldeándose en las mentes de los jóvenes al otro lado del oceáno con algunas variaciones y acabar creando un estilo musical propio e irresisitible, y mandar sus naves y sus grupos hacia la British invasion a la antigua colonia.

Así que su primer disco, titulado como el grupo, contenía unas cuantas de esas versiones, y el primer puñetazo propio, una canción que todos habeís escuchado y que a todos os ha hecho mover la cabeza: You really got me. No podía haber inicio mejor que ese tema, así que el segundo disco debía prometer bastante, supongo. Lo cierto es que parece que la compañía apretó bastante para que saliera rápido al mercado, y KINDA KINKS aunque con buenas canciones (un clásico, quizá menor, Tired of waiting for you, una versión del inmarcesible Dancing in the street de Martha & The Vandellas, y alguna más) no resulta aún un disco del todo satisfactorio, aunque nunca desagrada su escucha, y es una mejora respecto del primero. Así como el tercero respecto del segundo; THE KINK KONTROVERSY es puro brit-pop antes del brit-pop, en la idea, al menos, las canciones no llegan a arrebatar, pero el sonido del grupo se ha ido caracterizando y sumiendo en una dirección que parece que eclosionará con fortuna.

Y vaya si lo hace. FACE TO FACE es una absoluta maravilla, su primer disco indiscutible, redondo, perfecto, mágico, e inicia su mejor época. Alternan potencia (Party line) una línea bucólica y melancólica (Rosey, won´t you please come home, Too much on my mind) la melodía british por excelencia (Dandy) y dan con una bomba atómica de una dulzura y placidez incomparable (Sunny afternoon, nº 1 en la semana en que la selección de Inglaterra ganaba su Mundial de fútbol, por cierto, hay justicia de alguna forma en el Mundo, a veces). Es cierto que parece un poco descompensado, en su segunda parte...personalmente opino que su inicio es tan fuerte, que hace parecer peor lo siguiente, pero que salvo una o dos canciones, es memorable (me contradigo, veo, ahora digo que es casi perfecto. Cosas de la pasión, que hace perder la perspectiva, supongo. Y qué)

http://www.youtube.com/watch?v=wflJkYf4w14

El siguiente disco sigue esa línea, a la vez versátil y característica del sonido del grupo. Se titula SOMETHING ELSE y realmente es algo más. Elimina ese rock de garaje tan fresco y se adentra en una línea conceptual y sencilla, basándose en la música tradicional británica y en el pop fresco del que ya empezaban a ser de sus mejores exponentes. Aparte de Waterloo sunset, la mirada al mundo desde una ventana solitaria y clásico absoluto, destacan David Watts y su comienzo memorable, la lindísima historia de dos hermanas viviendo vidas diferentes de Two sisters y una de las ocasiones en que Dave demostró que podía ser un compositor que en ocasiones llegara a la cima inalcanzable de su hermano, Death of a clown. Imprescindible.

http://www.youtube.com/watch?v=CK-Po-IGY8k

Y así, tras discos que no hacían sino mejorar a los anteriores cada uno de ellos, era comprensible que hubiera un bajón creativo, la presión era alta, el árbitro nos perjudicó... . Pues nada más lejos de la realidad, los dos siguientes discos son para mi gusto sus mejores obras y piezas angulares de la música popular, apabullantes, inolvidables, flores resistentes al tiempo. Me los llevaría a una isla desierta, si tuvieran enchufes para conectar el reproductor.

"We are the villega green preservation society" se anuncian nuestros ídolos en la primera frase del disco que se llama justo así, THE VILLAGE GREEN PRESERVATION SOCIETY

http://www.youtube.com/watch?v=zL9tyzE83nc

El disco trata de la idea de la vida sencilla de la Inglaterra, idealizándola ("Preserving the old ways from being abuse/protecting the new ways for me and for you/what more can we do?") y revistiendo dicha idea de música bucólica y folclórica, que evoca la naturaleza y el campo, la tranquilidad y el sosiego. No fue el disco más rompedor, pero ha sido uno de los mejores de siempre y de cualquier grupo o solista. Ahí queda eso. Ahí quedan joyas como Picture book (la habeís oído), Village green y su historia triste de un amor que va muriendo, a una chica y a un lugar, Animal farm, Starstruck...todas. Dejo una por aquí, la primera que encontré podría haber puesto cualquiera de esta maravilla de disco. Puede que a alguno les parecan cursis, pues...hijos, si porque me guste esto y repita las palabras "cari", "churri" y "chupi" muchas veces al cabo del día soy un cursi, pues perdonadme por ser un cursi. En fin, prosigamos.

http://www.youtube.com/watch?v=vqJR5aPzucc

http://www.youtube.com/watch?v=dRQwtTLMlBc


Y por si no hubiera sido suficiente con esta exhibición, el siguiente disco estuvo también a una altura olímpica. Era la culminación del camino hacia el album conceptual que habían iniciado desde casi el principio de su carrera (conceptual, no coñazo) y que trataba de la vida deprimida de un hombre en el antiguo imperio. Su nombre era Arthur (una resonancia bastante potente para un inglés, supongo), bueno, el título completo del disco era ARTHUR OR THE DECLINE AND FALL OF THE BRTITISH EMPIRE, así que mejor lo dejamos en Arthur. Inicialmente iba a formar parte de una serie, que no llegó a ver la luz.

¿Cómo empezar con este disco?. Pues por el principio, con la canción que debería sustituir al We are the champions en cualquier victoria deportiva, aunque haya que modificar la letra

http://www.youtube.com/watch?v=TraFxjPyDns

Siguen la ácida Yes Sir, No Sir y la emocionante Some mother´s son, tan frágil como la vida de los soldados que se va, Drivin´ que es una frivolidad irresistible...y en el corte séptimo, tras dos grandes canciones más (parece que las que no nombro son malas, pero es que si tuviese que nombrar todas...), el tiempo se detiene para que podamos sentir el esplendor de Shangri-La, tremenda. Y las demás canciones siguen fluyendo y entran en la sangre sin dificultad para incorporarse a su curso. Una maravilla absoluta.

Al considerar Arthur y Village Green Preservation Society sus cimas, creo que es justo que la primera entrada finalice aquí. Intentaré resumir más en las siguientes, que tienen muchísimas canciones memorables...pero ya no tan concentradas, creo. Por adelantar un poco y dejaros con ganas de más (iluso de mí... xD), os diré que el siguiente disco tiene una canción amosísima y divertidísima, sobre un chico que liga en un bar con una chica de una fuerza asombrosa y voz grave. ¡Hasta entonces!

P.D: Bueno, para dejar buen sabor de boca, esta canción que no se incluyó en ningún disco, que yo sepa, http://www.youtube.com/watch?v=TQAR-nx4w88 , sobre carnaby street, calle en la que no he estado, y la pasión por la moda, puro cockney, o eso dicen si alguien sabe lo que es el cockney, que me lo diga :DDD, aparece en la película En el nombre del padre

Hasta pronto, espero que escucheís alguna canción y os queden anas de más, o las volvaís a descubrir, como algo que creiaís casi perdido y vuelve para daros gozosos instantes de felicidad. God save The Kinks!!

P.D 2: Siento tener que haber puesto enlaces, directamente el video de youtube no supe, y de goear tampoco, sorry, espero que no os incomode mucho :)